Terapia para infantes y adolescentes

Terapia para infantes

Durante las etapas del desarrollo de los niños y niñas y en el proceso de adaptación a su contexto, los niños pueden experimentar diferentes dificultades que pueden afectar a su comportamiento, su estado emocional o su funcionamiento. En muchas ocasiones, estas dificultades pueden generar malestar e interferencias en el día a día del menor y de las personas de su alrededor.

Desde PsicoPonent realizamos la atención psicológica infantil elaborando una evaluación completa del niño y su entorno, poniendo especial énfasis en la etapa evolutiva en la que se encuentra el menor. Durante todo el proceso terapéutico se trabajará con el niño directamente, pero sobre todo se trabajará también con las figuras parentales, de forma que al final del proceso tanto el niño como los padres dispongan de más recursos para afrontar los retos vitales.

Dependiendo del momento evolutivo del niño/a se pueden detectar diferentes tipos de problemas:

  • Ansiedad y miedos
  • Problemas de conducta y escolares
  • Dificultades para dormir e incontinencia urinaria.
  • Problemas del estado de ánimo: tristeza, irritabilidad.
  • Hiperactividad, problemas de atención y concentración
  • Problemas para relacionarse

Terapia para adolescentes

La adolescencia es una etapa de transición a la vida adulta en la que la persona puede experimentar grandes cambios y también diferentes dificultades. En algunas ocasiones estas dificultades pueden generar mucho malestar e interferencias en la vida diaria. Es la etapa de mayor fragilidad y la persona puede tener dificultades para gestionar situaciones cotidianas como rupturas de pareja, cambios corporales, situaciones estresantes como la pérdida de un ser querido o sufrir bullying.

Es importante que durante todo el proceso terapéutico, la problemática también se vea de la perspectiva del adolescente, para poder ayudarle a que sea una parte activa de su mejora y su proceso de cambio.

En esta etapa crítica del desarrollo, que es la adolescencia, nos encontramos frecuentemente con diferentes problemáticas que se pueden trabajar durante el proceso terapéutico:

  • Problemas de conducta, impulsividad e ira.
  • Autolesiones e ideas de muerte.
  • Malestar emocional por la separación de los padres.
  • Problemas del estado de ánimo: insatisfacción vital, tristeza, irritabilidad.
  • Problemas de ansiedad, estrés y miedos.
  • Dificultades en la interacción social y problemas de autoestima.

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